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sábado, 6 de junio de 2015

El amor profundo de un belga por el arte uruguayo






El belga Fernand Huts presentando la muestra Exposición de arte latinoamericano


En los últimos 20 años el Fernand Huts y su esposa han creado una de las colecciones más grandes de obras uruguayas en Europa, incluyendo cuadros de Torres García, Blanes, Figari y esculturas de Atchugarry

Inés Guimaraens





Pablo Atchugarry en Amberes con una de sus obras a escala


Inés Guimaraens
Un hombre corpulento, elegante y con gesto severo entra a una galería de arte en la Ciudad Vieja. Observa las obras en exposición y se detiene en un cuadro. Lo mira con atención y pregunta el precio, como un turista más que curiosea sin verdadero interés. Realmente quiere esa obra, pero no lo demuestra. El precio no le convence y regatea. Es extranjero, un europeo que por negocios se dejó caer en este rincón tan alejado de su viejo continente y quedó atrapado por algo que los propios uruguayos no alcanzan a apreciar. Forma parte de una de las familias más ricas de Bélgica y no solo se llevó ese cuadro del pintor uruguayo Francisco Matto, sino seis de las obras del artista que se encontraban en la galería de Oscar Prato.

Ese hombre es Fernand Huts, el belga que encabeza la multinacional Katoen Natie, una empresa familiar devenida en uno de los principales grupos de logística portuaria en el mundo. Junto a su esposa, Karine, construyeron en los últimos 20 años una de las colecciones más grandes de arte uruguayo en Europa.
Cuadros de Joaquín Torres García son acompañados por la obra de Matto, la de Julio Alpuy, Daniel Batalla, José Gurvich y otros grandes maestros uruguayos, principalmente de la Escuela del Sur.

Poseen además cuadros de gran valor de Juan Manuel Blanes y Pedro Figari, como también obras del escultor Pablo Atchugarry.




Detalle de la obra "Las visitas" (1935), de Pedro Figari

Los Huts no solo se convirtieron en grandes coleccionistas y admiradores del arte uruguayo, sino además en militantes de la pintura y escultura de este país. Se impusieron la misión de difundirlo entre los principales círculos de coleccionistas europeos. Los primeros pasos en esa dirección se dieron la semana pasada, con la inauguración de una exhibición en Amberes y la publicación en toda Europa de un libro especializado que pone el foco en la pintura uruguaya moderna.

Primera introducción

En el marco de los festejos del 160° aniversario del grupo, Katoen Natie inauguró el martes su Exposición de arte lationamericano en la ciudad de Amberes, en Bélgica. "Utilizando piezas del grupo, hicimos una colección centrada básicamente en el arte uruguayo, pero por razones políticas y pragmáticas lo complementamos con arte de otros países de América Latina", explicó el propio Huts a la prensa uruguaya invitada por el grupo belga al evento de inauguración de la exhibición.

El objetivo es atraer a los grandes coleccionistas belgas y del resto del continente y, con la excusa de ofrecerles un paseo por la obra de grandes artistas del continente, introducirlos al menos conocido arte uruguayo. "Esa es la razón por lo cual no se llama Exposición de arte uruguayo sino Exposición de arte latinoamericano", aseguró el millonario. "Hay arte de México, de Venezuela, de Chile, de Argentina, de Cuba, pero más de la mitad es arte uruguayo. Es el nexo de la exposición", enfatizó.

La segunda iniciativa es un libro titulado Arte desde América Latina moderno y contemporáneo. Fue escrito por el experto en historia del arte y crítico Laurens Dhaenens y editado por Lannoo, una de las principales editoriales europeas especializadas en arte. Según el autor, el libro realiza un recorrido por las principales corrientes artísticas del continente, con un énfasis particular en el constructivismo latinoamericano, la corriente iniciada por Torres García, uno de los más reconocidos artistas uruguayos en el mundo. Su emblemático óleo Arte constructivo, realizado en 1943, ilustra la tapa del libro.




Detalle de la obra "Veleta" (1965-1968), de Francisco Matto


"Al igual que mucha gente del norte, (mi marido) se sintió muy atraído por el sur y el foco de su pasión fue un paisito chico y de pequeña población que la mayoría de los europeos ni siquiera conoce: la República Oriental del Uruguay", dijo Karine Huts durante la ceremonia de inauguración de la muestra, el martes. Del evento participaron el presidente flamenco, Geert Bourgeois; el embajador uruguayo en Bélgica, Walter Cancela, y el director de Cultura del Ministerio de Educación y Cultura, Sergio Mautone.


Primero en el exterior


En una conferencia previa al evento de inauguración de la muestra, Mautone dijo: "Tal vez nosotros tenemos una vocación de país chico y eso hace que nos validemos a través de la mirada del otro".

Uruguay es conocido a nivel internacional por la cantidad de futbolistas de alto nivel que tiene con relación a su escasa población. Sin embargo, dijo el jerarca, ese mismo "milagro" se produce en el arte, donde Uruguay es también un país particularmente prolífico, aunque "no sea valorado adecuadamente".
"Ojalá que esto sea el inicio de una relación que pueda extenderse en el tiempo y que pueda conformar un Uruguay no solo como país natural, productivo, tecnológico, sino también como país de arte", agregó Mautone. Los Huts, conocidos por su espíritu de empresa, no dejaron pasar la oportunidad para plantear un camino de acción para alcanzar el objetivo de difundir el arte latinoamericano.

"Ojalá que esto sea el inicio de una relación que pueda extenderse en el tiempo y que pueda conformar un Uruguay no solo como país natural, productivo, tecnológico, sino también como país de arte", dijo el ministro de Educación y Cultura, Sergio Mautone

"Esta muestra podría ser un buen arranque para armar una colaboración entre el gobierno uruguayo y de la región, o coleccionistas privados, para juntar fuerzas en una exposición itinerante con el arte uruguayo y latinoamericano como centro", manifestó Fernand Huts.

Lo cierto es que el arte uruguayo ha ganado terreno en la escena internacional en los últimos tiempos y ha empezado a colarse en los principales círculos de coleccionistas. Con mayor frecuencia, es estudiado por grandes académicos, es escogido por curadores de renombre y exhibido en exclusivas galerías y museos.
De hecho, la semana pasada se subastó por US$ 300 mil un cuadro de Torres García al que no se esperaba colocar en más de US$ 100 mil.

El prestigioso Museo de Arte Moderno de Nueva York (MoMA) realizará entre el 25 de octubre y el 15 de febrero una retrospectiva de la obra del pintor uruguayo. En la presentación de esa exposición, el MoMA describe a Torres García como "uno de los más complejos e importantes artistas de la primera mitad del siglo XX", cuyo trabajo "abrió el camino a la transformación del arte moderno en los dos lados del Atlántico".




Detalle de la obra "Arte constructivo" (1943), de Joaquín Torres García

El artista viajero


Para el galerista uruguayo Oscar Prato, "la historia del arte de Uruguay está repleta de artistas viajeros". Los uruguayos talentosos en el campo de las artes visuales siempre tuvieron que salir al exterior por dos motivos. En primer lugar, "para formarse". Pero fundamentalmente, "para poder vivir, porque el mercado del arte en Uruguay es muy pequeño y poco menos que no existe".

Uno de esos ejemplos es el artista plástico Pablo Atchugarry, que hoy es uno de los artistas uruguayos más conocidos en Europa. Varias de sus obras se encuentran en museos prestigiosos y en algunas de las principales colecciones particulares. Por ejemplo, desde el pasado mayo y hasta febrero de 2016, el escultor expone una retrospectiva llamada Città Eterna, eterni marmi en el Museo de los Foros Imperiales y Mercado de Trajano de Roma. Consiste en una selección de 40 obras, 10 de ellas monumentales y casi todas esculpidas en mármol de Carrara.

Según dijo Atchugarry en Amberes a El Observador, el fomento del arte uruguayo "es un trabajo que hay que hacer piedrita por piedrita. Nuestros jóvenes no tienen la posibilidad de salir al exterior a mostrar su trabajo y es muy importante para un artista que se muestre, en el interior pero fundamentalmente en el exterior del país".

"Si pensamos en el trabajo de Miguel Ángel, Leonardo y otros grandes creadores, gracias a los mecenas pudieron realizar las obras que hoy son patrimonios de la humanidad. Es muy importante que ese mecenazgo continú", afirmó el escultor Pablo Atchugarry

Para Atchugarry, el mecenazgo de empresas y particulares es fundamental. Actualmente la colección de los Huts cuenta con varias piezas del artista y tiene encargados grandes trabajos para Katoen Natie.


"Si pensamos en el trabajo de Miguel Ángel, Leonardo y otros grandes creadores, gracias a los mecenas pudieron realizar las obras que hoy son patrimonios de la humanidad. Es muy importante que ese mecenazgo continúe, que aparezcan empresas que contribuyan a que el arte no esté encerrado en la casa de un privado sino a disposición del público", sostuvo en una conferencia de prensa desde Amberes.

Al mismo tiempo, reclamó un rol más activo por parte de los gobiernos en la promoción del arte."Los Estados deben promover a los jóvenes que empiezan y que no son reconocidos. A veces ni siquiera tienen apoyo en el seno familiar. Puede coleccionar obras, poner obras de los artistas jóvenes en los espacios públicos, en escuelas, en liceos, e ir fomentando que el arte es un patrimonio de todos al servicio de la humanidad".

Pero las oportunidades que hoy existen para esos jóvenes son mayores a las que existían hace algunos años. Según señaló la artista plástica argentina-uruguaya María Causa, durante la conferencia de prensa en las oficinas de Katoen Natie en Amberes, "de un tiempo a esta parte el centro mira más la periferia. Es un movimiento global que hay que aprovechar"
Fuente
http://www.elobservador.com.uy


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