Ferran Barenblit presenta su última temporada al frente del museo, que dejará en agosto cuatro años antes de lo previsto
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El año 2021 aparece ante los responsables de museos como un tiempo de esperanza en el que sus centros, pese a la pandemia, puedan seguir abiertos y ofreciendo sus programaciones adaptándolas a las nuevas circunstancias. El Museo de Arte Contemporáneo de Barcelona, Macba, ha presentado esta mañana la que será su programación para los próximos 18 meses, coincidiendo con el final del mandato de su director, Ferran Barenblit el 31 de agosto, después de que la comisión delegada del Macba, con el Ayuntamiento de Barcelona a la cabeza, anunciara que solo prorrogaría su contrato un año más y no los cinco previstos en su contrato, -de cinco años, más otros cinco-; un tiempo que Barenblit había considerado necesario para consolidar el proyecto que comenzó en 2015.
Sea como fuere, el Macba, pese a las incertidumbres de la pandemia y del final de etapa, ha presentado una temporada con nombres propios como la primera retrospectiva en España sobre la vida y la obra del artista cubano, nacionalizado estadounidense, Félix González-Torres; que falleció a los 39 años en Miami; la colección de Rafael Tous y su mítica Sala Metrònom que se reabrirá después de 15 años cerrada a los que se sumarán, ya en 2022, la primera monográfica en España de Cinthia Marcelle y otra dedicada a los tapices, telas, dibujos y videos de Teresa Lanceta.
“Será la última vez que me siente en esta silla para anunciar una temporada; en realidad una temporada y media, para cumplir el encargo que me hizo la comisión delegada de presentar la programación de 2021 y hasta julio de 2022”, ha explicado Barenblit al inicio de la presentación; que en tono de despedida ha remarcado que “muchas de las ideas e intuiciones que tenía en julio de 2015 han ido tomando forma en este tiempo; en un Macba que se basa en una programación y una colección extraordinarias; un museo provocador e incómodo; emancipado y emancipador, que todo lo que hace lo hace con una finalidad educativa y de diálogo con una ciudadanía que cada vez es más crítica; abierto y acogedor que asume sus objetivos de escribir y reescribir una historia del arte desde el presente mirando al pasado y proyectado al futuro”, ha asegurado Barenblit.
La conservadora jefa del museo, Tanya Barson, ha explicado las principales citas, como la mencionada exposición dedicada a González-Torres (a partir del 26 de marzo); la primera desde 1995 en España de este pionero en concebir lo cultural, lo sexual y lo nacional como áreas en conflicto, que luchó contra la estigmatización del sida en los Estados Unidos de los ochenta y noventa; enfermedad que acabó con él a los 39 años. “Se centra no en la lectura de su obra en relación con Estados Unidos, sino con España y Latinoamérica y por eso abordará los temas de poscolonialismo, memoria, la autoridad, la libertad, la lucha contra la homofobia y la identidad nacional, además de su influencia en la estética queer”, ha explicado, mientras que Barenblit ha apuntado que, con la pandemia, la exposición también se puede leer “relacionada con la fragilidad del cuerpo humano”. En la muestra se podrán ver obras en apariencias sencillas pero llenas de carga social y política como Go-go dancing platform. Bailando en gayumbos en el que un musculoso joven baila en calzoncillos de lamé plateado ensimismado con la música que él solo escucha en su reproductor con auriculares.
Le seguirá, en mayo, En tiempo real. La colección Rafael Tous de arte conceptual que mostrará una selección de artistas de la colección que dio poca antes del inicio de la pandemia al museo “de forma desinteresada”, ha resaltado Barenblit. La exposición se desplegará en diversos espacios del museo y se reabrirán las puertas de la Sala Metrònom --creada por Tous--, en el Born; una sala clave para varias generaciones de artistas mientras estuvo abierta, entre 1984 y 2006 acogiendo a numerosas producciones, performances y exposiciones. Allí se homenajeará al artista Jordi Benito con su instalación ‘Les portes de Linares’, creada originalmente para este lugar en 1989.
En otoño se abrirá la muestra ‘Panorama 21. Apuntes para un incendio de los ojos’, una exposición colectiva que quiere reflejar “la intensidad del momento actual y la vitalidad de nuestro contexto a partir de jóvenes emergentes”, según Barson que ha asegurado que esta iniciativa nace con la voluntad de continuar a lo largo de los años.
Ya en 2022 el Macba albergará la primera exposición individual en España de Cinthia Marcelle, reconocida por su obra fílmica y sus instalaciones a gran escala y que Barson ha calificado de una de las más influyentes de la nueva generación de artistas brasileños. Militante y activista de izquierda, en la exposición se podrán ver sus trabajos de las dos últimas décadas y en particular los relativos contra el gobierno de Bolsonaro y a la discriminación a las personas trans en su país.
En julio de 2022 Nuria Enguita, directora del IVAM, revisará para el Macba toda la carrera de Teresa Lanceta, desde los años 70 a la actualidad, entrada en lo textil, y la muestra Blue& Black Futures explora los diferentes enfoques utópicos y universos concebidos por artistas, escritores, músicos y poetas negros desde el siglo XIX a la actualidad.
Durante el turno de preguntas Barenblit y su gerente, Josep Maria Carreter han explicado que en este complicado año las administraciones mantienen su compromiso con el Macba y podrán contar con un presupuesto de 11 millones de euros (un 10% menos que el año anterior); pero al disminuir los ingresos propios, los 2,2 millones en condiciones normales con los que se cuenta para programación han descendido un 50%, hasta algo más de un millón de euros.
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