Susana Vera / Reuters
MADRID - Una batalla real está gestando aquí.
Por un lado está el Museo del Prado, un repositorio de renombre del arte y un escaparate de la cultura española que atrae a un gran número de turistas. Por otro es un recién llegado impetuoso, que emerge en la escena en capas de granito gris de una colina cerca del palacio real barroco de los reyes españoles.
Antes de su inauguración, el advenedizo, el Museo de las Colecciones Reales, insiste en que el Prado se rinde cuatro pinturas, incluyendo sus dos principales lugares de interés - "El Jardín de las Delicias" de El Bosco y una representación suntuosa del siglo 15 de la ascendencia de Cristo de la cruz de Rogier van der Weyden.
La respuesta del Prado a la demanda, por el presidente de la agencia de patrimonio público del país, fue inequívoca.
"Si él está a la espera de tener las pinturas en su lugar, tiene que esperar hasta que el infierno se congele", el presidente de la junta directiva del Prado, José Pedro Pérez-Llorca, dijo en una declaración pública la semana pasada.
Las pinturas en disputa fueron retirados de la Real Monasterio de San Lorenzo de El Escorial y se colocan para su custodia con el Museo del Prado por las autoridades gubernamentales durante la Guerra Civil española, hace casi 80 años. Pero ahora el Patrimonio Nacional, la agencia de patrimonio que administra todas las explotaciones reales, desde los palacios de yates antiguos de obras de arte que se ha prestado en los últimos años, los quiere de vuelta para la exhibición en su nuevo museo.Foto
"El Jardín de las Delicias" de El Bosco, es la otra atracción principal en el Prado, en Madrid.
Museos de toda España están viendo el tira y afloja con gran interés, temeroso de que las piezas entre sus tenencias que tienen una procedencia real podrían ser tirado al lado. La agencia de la herencia, dirigido por José Rodríguez-Spiteri, su presidente, tiene cerca de 1.000 obras en otros museos y ya ha recordado varias. El presidente de la agencia ha señalado su interés en volver a llamar obras de El Greco, Velázquez y Goya que habían estado en préstamo.
"Estoy seguro de que es un muy buen proyecto, pero para crear este nuevo museo, ¿es necesario desmontar otro que es el más importante de España?", Dijo Pepe Serra, director del Museo Nacional de Arte de Cataluña, que a principios de este año voluntariamente entregó una pintura religiosa por Anton Raphael Mengs que fue cedido por el Patrimonio por lo que podría ser utilizado en el nuevo museo.
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Esta no es la primera vez que los museos aquí han luchado por la propiedad del arte. En un caso de alto perfil, el Museo del Prado en 2010, sin éxito, trató de recuperar el "Guernica" de Picasso desde el cercano Museo Reina Sofía de Madrid.
La petición de la agencia de patrimonio de las pinturas es un cálculo financiero. Las instituciones culturales en España han sufrido recortes en los subsidios estatales y el Patrimonio Nacional no fue la excepción.Después de pasar € 158 millones sobre $ 178.000.000 - en dinero público en el nuevo museo, que está programada para abrir en el otoño de 2016, el Patrimonio Nacional tiene la esperanza de atraer a más visitantes por aspersión algunas atracciones estrella entre las 150.000 obras en la colección real .
"Es un tipo muy agotador de trabajo, porque siempre estás bajo presión para ofrecer interesantes, piezas dramáticas de arte para que sus ciudadanos están interesados", dijo Rodríguez-Spiteri, que provocó la controversia después de concluir que el nuevo museo no podía dibujar suficientes visitantes únicos objetos reales.
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"No se puede poner una fila de los tapices más fantásticas o una fila de carros o una fila de armadura, y conformarse con eso", dijo.
No hay duda de que las obras pertenecen a la colección real del Patrimonio Nacional; el Museo del Prado, incluso los enumera como estando en préstamo temporal. El cuadro de Van der Weyden fue adquirido por María de Hungría, que dejó a su sobrino el rey Felipe II. En 1574, se le dio al monasterio del Escorial, donde permaneció durante 362 años, hasta que fue trasladado al Museo del Prado en 1936.Foto
El Museo advenedizo de las Colecciones Reales de Madrid, en construcción, es abrir en el otoño de 2016. CréditoSanti Palacios para The New York Times
El trabajo de Bosch, un símbolo cargado ambicioso tríptico del pintor medieval holandés, fue adquirido por el rey Felipe II y presentado en 1593 al Escorial, donde se colgó hasta que fue enviado al Prado para su restauración en 1933 y luego poner en préstamo en 1936 para su custodia.
Pero las pinturas se encuentran en posesión del Prado, y se ha presionado con fuerza un reclamo emocional, así como su carta de triunfo como el museo más popular en Madrid, con 2,5 millones de visitantes el año pasado. El rostro golpeado de la Virgen María de la pintura en disputa por van der Weyden es la sopa en la ciudad para una nueva exposición allí, incluyendo en un enorme anuncio en el aeropuerto de Madrid.
"Privar al Prado de esas pinturas sería algo parecido a un delito", el Sr. Pérez-Llorca, abogado y ex ministro de Relaciones Exteriores, dijo en una entrevista. "El Prado es una joya española, y estas pinturas enriquecer el museo."
El Sr. Rodríguez-Spiteri, ex embajador en Portugal y Alemania, exigió las pinturas verano pasado. La lucha entre las instituciones ha pasado desde entonces, y funcionarios gubernamentales de alto nivel se han dibujado en.
En cuanto a la familia real, se ha quedado fuera de la refriega. Un portavoz se negó a comentar y refirió todas las preguntas al Patrimonio Nacional.
"La familia real siempre evita interferir en peleas políticas", dijo Ana Romero Galán, periodista y autor de "End-Game", sobre la abdicación del Rey Juan Carlos I el año pasado en favor de su hijo, Felipe VI. La apertura del museo real fue pensado originalmente para que coincidiera con lo que iba a ser el 40 aniversario del reinado de Juan Carlos el próximo año.
El diputado presidente del Gobierno español, Soraya Sáenz de Santamaría ha dicho que el conflicto ha terminado y que las pinturas no se moverá.Pero si esto es así, no es aparentemente evidente para las dos instituciones pendencieros.Foto
José Rodríguez-Spiteri, presidente de la agencia de patrimonio público del país, insiste en que el Prado se rinde cuatro pinturas, incluyendo sus dos principales lugares de interés.CréditoSanti Palacios para The New York Times
Cuando el Prado montó una exposición el pasado otoño dedicado al escultor italiano Gian Lorenzo Bernini, el Patrimonio Nacional se negó a prestar siete obras, alegando preocupaciones sobre los riesgos de viaje.
Y el director del nuevo museo de la colección real, José Luís Díez, una vez a la comisaria del Prado, fue criticado por sus antiguos colegas allí cuando una página web de Patrimonio Nacional incluye las cuatro pinturas en disputa en una lista de sus principales obras maestras .
Las dos instituciones parecieron llegar a un acercamiento con el público del Prado van der Weyden espectáculo , que incluyó "Calvario", de la artista recién restaurada en un proyecto conjunto de cinco años con la agencia, que es el dueño. Un funcionario del Patrimonio de alto rango asistieron la inauguración de la exposición a finales de marzo.
Pero en las últimas semanas, las tensiones surgieron de nuevo como el Patrimonio ofrece vistas previas de su museo, diseñado para integrarse con la arquitectura del palacio y organizado en torno a los miembros de las familias de los Habsburgo y los Borbones que adquirieron los artefactos.
En un recorrido por el sitio, el director del museo, el Sr. Luís Díez, mostró una gran galería que dijo originalmente había sido destinado a una exposición carruaje real. El plan fue desechado, dijo, porque el espectáculo no sería "reflejan la alta calidad de la colección real, ni la importancia del museo."
Poco después de la vista previa, el Sr. Rodríguez-Spiteri declaró en el periódico más importante del país, El País, que los cuatro pinturas en disputa eran esenciales "para el futuro" del nuevo museo.
La última escaramuza ocurrió cuando el Prado buscó extender los populares van der Weyden exposición un mes más allá de su cierre programado, el 28 de junio, pero su solicitud para prolongar el préstamo de la pintura "Calvario" recién restaurada fue rechazada.
En los últimos días, una serie de reuniones del gobierno se llevó a cabo para tratar de encontrar una solución, tal vez mediante la aclaración de la situación jurídica de las obras en préstamo a los museos del Prado o hacer otro intercambio. Alternativas han flotado, tales como la rotación de las cuatro obras entre los dos museos.
El Sr. Pérez-Llorca, dijo el Prado no comprometería. Entre sus preocupaciones es que el allanamiento se abrirá la caja de las reclamaciones de Pandora.
"No es la propiedad privada; pertenecen al público ", dijo. "Privar al museo debido a un capricho comenzaría el desmantelamiento del Prado".
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Fuente
http://www.nytimes.com
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