Diez años de arte urbano

                                             Una de las obras de Stinkfish, presente en esta edición del festival . E. M.

El evento nació en abril de 2006. La intención, explican sus creadores, era «hacer confluir simbióticamente dos mundos inicialmente alejados como la universidad y el arte urbano». El festival Poliniza lo consiguió desde el inicio gracias a «su realismo», porque se interviene directamente, sin falsos muros, y por su «impacto mediático e internacionalidad». Han pasado ya 179 artistas de 15 países diferentes como el Reino Unido, Italia, Alemania, México, Países Bajos, Francia, Colombia, Cuba, Ucrania...

La Universitat Politècnica de València (UPV), a través de su Área de Actividades Culturales, presentó ayer la que será la X edición de su festival de arte urbano, a celebrar durante toda esta semana, hasta el viernes, en las instalaciones de su campus de Vera.

Este año participarán 45 artistas pictóricos: 7 individuales y una crew seleccionados a través del IX Certamen de Intervenciones de Pintura Mural (en la primera edición, la selección se realizó sin concurso), 24 alumnos de la asignatura de 'Pintura y Entorno' de la Facultad de Bellas Artes y 12 del Máster de Producción Artística de la UPV.

Los seleccionados a través del certamen son KAWAMO (Oaxaca de Juárez, México), Roberto Cireddu (Muravena, Italia), Juan Sánchez (Murcia), H101 (Badalona), FEOFLIP (La Laguna, Tenerife), SABEK (Madrid), SPOGO (Badalona) y la crew RESKATE (Barcelona).

Serán ellos, junto a los 36 artistas UPV citados, los encargados de intervenir directamente sobre 17 muros del campus (tres del Ágora, 11 de la Facultad de Bellas Artes, uno del Rectorado y dos de la ETS de Gestión de la Edificación). En total, más de 700 metros cuadrados en los que ya se está trabajando, desde ayer por la tarde. Además, con motivo del décimo aniversario del festival, la UPV inauguró el pasado 26 de marzo la exposición 10x10 Poliniza, que incluye más de 900 fotografías realizadas por Kike Sempere de las nueve ediciones precedentes del festival y que pone la guinda al festival junto a un buen puñado de actividades complementarias como fanzines, teatro o danza.

Y siguiendo con lo auténtico, la organización recuerda que el resultado permanecerá en los muros un año, hasta la siguiente edición. Porque el grafiti, además de verdadero, es efímero.

Fuente

http://www.elmundo.es