Miriam Martínez muestra una de sus obras. / Rafa Márquez
Miriam Martínez Abellán quiere expresar con sus collages una crítica a la sociedad de consumo
Abellán (Cieza, 1978) al hablar sobre los collages -cargados de sentido del humor, simbolismo y crítica social-, que presenta en el Museo Siyasa. Esta primicia se avanza en el título de la exposición, 'MUS.A.S', un juego de palabras, en el que se quiere resaltar la intencionalidad de S. A. (sociedad anónima). ¿Por qué esta especie de malabarismo? «Es que estas musas no son aquellas de las que hablaba Hesíodo, diosas de la mitología griega, que inspiraban la música o la poesía. Son mujeres de a pie, de una sociedad gregaria y mecanizada, con necesidades de expresión».'MUS.A.S'
MIRIAM MARTÍNEZ ABELLÁN
Dónde: Museo Siyasa (Cieza. C/ San Sebastián).
Cuándo: Hasta el 7 de junio.
Horario: De martes a sábados, de 11.00 a 13.00 y de 17.30 a 21.00 horas. Domingos y festivos, de 10.30 a 14.00. Lunes, cerrado
Licenciada en Historia del Arte y profesora de Secundaria, encontró en el collage su «verdadera expresión artística, porque la búsqueda de imágenes, de aquí y de allá, y su combinación con otros elementos, me da un juego amplio y divertido de texturas, donde a veces prima la estética por encima de todo concepto». ¿Cómo le llegó tamaña entrega? «Cuando finalizaba Bellas Artes, noté que me apasionaba el arte contemporáneo, porque es un reto para el espectador, y porque me permitía jugar y divertirme, pero, a la vez, crear un mensaje serio».
Irónico título
¿Cómo entiende el espectador el cambio que sufren las imágenes de las musas? «He cambiado sus atributos clásicos por otros actuales, propios del consumo, como televisores o planchas, para que el público se pueda identificar con ellas fácilmente». Además, reconoce que le gusta «provocar la sorpresa». ¿Cómo lo consigue? «Porque al espectador puede resultarle chocante ver, en un cuerpo exuberante de mujer, la sustitución de la cabeza por una coliflor. Esto también forma parte del estilo del collage».
Aficionada a contar historias, «cada collage tiene una historia intrínseca, que puede ser aquella de la que he ido cogiendo las imágenes o la historia de la propia imagen en sí misma». ¿Qué reacciones provocarán ciertas historias que parecen incomprensibles? «Intento dar libertad para que cada cual saque sus propias conclusiones. Hago arte conceptual, porque quiero presentar mis conceptos de la realidad, no la realidad en sí; pero esto no aleja al público. No es una terminología conceptual, limitada a unos pocos, sino todo lo contrario. Quiero que este concepto sea identificable. El collage está por todos lados: en la publicidad, en la prensa... Yo lo entiendo como una técnica que combina elementos diversos, que es un todo, que respira surrealismo o vanguardia, pero que siempre deja un punto de libertad para la interpretación. Es un universo enorme y original».
¿Busca la autosatisfacción? «Lo que me gusta es compartir mi visión particular del mundo, y no entiendo mis proyectos sin este compromiso. Lo que realmente me mueve a hacerlo no es solamente la estética del collage; también, su didáctica. De hecho, he incluido dos guías, que estoy haciendo llegar a todos los institutos, para que puedan mostrarse a los estudiantes que vayan a visitar la exposición. Cuando he visitado museos de Centroeuropa, el IVAM, al Macba o el Reina Sofía, me encantaba ver a los chavales interesándose por los contenidos de la exposiciones».
Heroínas
Recuerda a Picasso, Juan Gris, Hamilton, para afirmar que lo que ella hace es «collage puro», cortando directamente y pegando. «Esto imbrica un reciclaje, que puede dar otra posibilidad, una segunda mano a las imágenes que rescato. Me gusta este riesgo, respeto imágenes antiguas y su color o el hecho de recuperar retratos de mujeres, que en ciertas revistas aparecen dentro de contenidos machistas, pero que yo convierto, de alguna manera, en heroínas».
Con recortes de ropa, papel o fichas de póker recrea otras realidades, «porque me gusta diseccionar la realidad y alterarla. Hace un año decidí incluir el acrílico como fondo, para realzar las imágenes, o chapotearlo sobre ellas, porque esto me abre un nuevo campo en el simbolismo de los colores».
¿No hay otros métodos más accesibles? «El arte es hoy más necesario que nunca y, cuando faltan recursos, lo que no debe faltar es imaginación, que es muy importante transmitir y expresar. Pensar que en el mundo del arte todo está dicho es una predisposición aburrida. Si pensara esto, como hay tanta gente que hace collages, yo no los haría; pero creo que cada cual debe defender su visón de la cosas con el uso de su propia técnica».
En torno a las imágenes de las musas, se presentan otras instalaciones y obras retrospectivas. En el fondo todo recoge poesía, música, ciencia... «Como parte muy importante en la educación, dentro del sistema griego. Con esto -concluye la artista- se incluye lo que sería la defensa de la necesidad educativa y social del arte en la cultura».
Fuente
http://www.laverdad.es
MIRIAM MARTÍNEZ ABELLÁN
Dónde: Museo Siyasa (Cieza. C/ San Sebastián).
Cuándo: Hasta el 7 de junio.
Horario: De martes a sábados, de 11.00 a 13.00 y de 17.30 a 21.00 horas. Domingos y festivos, de 10.30 a 14.00. Lunes, cerrado
Licenciada en Historia del Arte y profesora de Secundaria, encontró en el collage su «verdadera expresión artística, porque la búsqueda de imágenes, de aquí y de allá, y su combinación con otros elementos, me da un juego amplio y divertido de texturas, donde a veces prima la estética por encima de todo concepto». ¿Cómo le llegó tamaña entrega? «Cuando finalizaba Bellas Artes, noté que me apasionaba el arte contemporáneo, porque es un reto para el espectador, y porque me permitía jugar y divertirme, pero, a la vez, crear un mensaje serio».
Irónico título
¿Cómo entiende el espectador el cambio que sufren las imágenes de las musas? «He cambiado sus atributos clásicos por otros actuales, propios del consumo, como televisores o planchas, para que el público se pueda identificar con ellas fácilmente». Además, reconoce que le gusta «provocar la sorpresa». ¿Cómo lo consigue? «Porque al espectador puede resultarle chocante ver, en un cuerpo exuberante de mujer, la sustitución de la cabeza por una coliflor. Esto también forma parte del estilo del collage».
Aficionada a contar historias, «cada collage tiene una historia intrínseca, que puede ser aquella de la que he ido cogiendo las imágenes o la historia de la propia imagen en sí misma». ¿Qué reacciones provocarán ciertas historias que parecen incomprensibles? «Intento dar libertad para que cada cual saque sus propias conclusiones. Hago arte conceptual, porque quiero presentar mis conceptos de la realidad, no la realidad en sí; pero esto no aleja al público. No es una terminología conceptual, limitada a unos pocos, sino todo lo contrario. Quiero que este concepto sea identificable. El collage está por todos lados: en la publicidad, en la prensa... Yo lo entiendo como una técnica que combina elementos diversos, que es un todo, que respira surrealismo o vanguardia, pero que siempre deja un punto de libertad para la interpretación. Es un universo enorme y original».
¿Busca la autosatisfacción? «Lo que me gusta es compartir mi visión particular del mundo, y no entiendo mis proyectos sin este compromiso. Lo que realmente me mueve a hacerlo no es solamente la estética del collage; también, su didáctica. De hecho, he incluido dos guías, que estoy haciendo llegar a todos los institutos, para que puedan mostrarse a los estudiantes que vayan a visitar la exposición. Cuando he visitado museos de Centroeuropa, el IVAM, al Macba o el Reina Sofía, me encantaba ver a los chavales interesándose por los contenidos de la exposiciones».
Heroínas
Recuerda a Picasso, Juan Gris, Hamilton, para afirmar que lo que ella hace es «collage puro», cortando directamente y pegando. «Esto imbrica un reciclaje, que puede dar otra posibilidad, una segunda mano a las imágenes que rescato. Me gusta este riesgo, respeto imágenes antiguas y su color o el hecho de recuperar retratos de mujeres, que en ciertas revistas aparecen dentro de contenidos machistas, pero que yo convierto, de alguna manera, en heroínas».
Con recortes de ropa, papel o fichas de póker recrea otras realidades, «porque me gusta diseccionar la realidad y alterarla. Hace un año decidí incluir el acrílico como fondo, para realzar las imágenes, o chapotearlo sobre ellas, porque esto me abre un nuevo campo en el simbolismo de los colores».
¿No hay otros métodos más accesibles? «El arte es hoy más necesario que nunca y, cuando faltan recursos, lo que no debe faltar es imaginación, que es muy importante transmitir y expresar. Pensar que en el mundo del arte todo está dicho es una predisposición aburrida. Si pensara esto, como hay tanta gente que hace collages, yo no los haría; pero creo que cada cual debe defender su visón de la cosas con el uso de su propia técnica».
En torno a las imágenes de las musas, se presentan otras instalaciones y obras retrospectivas. En el fondo todo recoge poesía, música, ciencia... «Como parte muy importante en la educación, dentro del sistema griego. Con esto -concluye la artista- se incluye lo que sería la defensa de la necesidad educativa y social del arte en la cultura».
Fuente
http://www.laverdad.es
No hay comentarios:
Publicar un comentario