Los pintores rusos de comienzos del siglo XX, nueva tendencia entre los coleccionistas de arte

Las casas de subastas apuntan un notable aumento del interés por los creadores rusos que abrazaron el modernismo europeo y que permanecían olvidados. Es notable el caso de Ivan Pokhitonov (1850-1923), que tuvo un gran éxito en vida y frecuentó los círculos artísticos de París, pero fue postergado en su país. Bonhmas, que organiza una gran venta de obras de la época, apunta que el interés de algunos "sofisticados coleccionistas rusos" está aumentando la cotización.

Los coleccionistas de arte han encontrado una nueva veta para adquirir obras que coticen progresivamente al alza. Eso piensa la casa de subastas Bonhams, que apunta una tendencia de reciente explosión: la pintura rusa de comienzos del siglo XX, anterior a la revolución bolchevique de 1917 o firmada por creadores que huyeron del país tras ella, una escuela de artistas que abrazaron el modernismo europeo y que hasta ahora habían sido postergados o semiolvidados. Otras imágenes 4 Fotos "En este momento, el interés de coleccionistas se está desplazando hacia los artistas rusos que abrazaron el modernismo europeo y que contribuyeron a la evolución artística de principios del siglo XX", señala la directora de Bellas Artes Rusas de la casa de subastas, Yelena Harbick. Según el análisis de Bonhams, hay un creciente interés por un grupo de pintores de la época y se ha detectado que "sofisticados coleccionistas rusos" están comenzando a montar repertorios recopilaciones. Un centenar de pinturas

 La casa de subastas organiza en su sede de Londres una venta de artistas rusos de las primeras dos décadas del siglo XX. La Russian Sale (Venta rusa), como la han bautizado, se celebra el 3 de junio con casi un centenar de cuadros, además de otras piezas de joyería, orfebrería, metal, cerámica y esculturas [PDF del catálogo]. Una naturelza muerta cubista de Alexandra Exter puede superar los 400.000 euros La pintura por la que esperan recibir ofertas más elevadas es Voilier et coquillage, de Alexandra Exter (1884-1949), una naturaleza muerta de inspiración cubofuturista-constructivista y tema marítimo pintado en los años treinta en París, ciudad en la que residía la artista, que huyó de Rusia tras la revolución de 1917. Bonhams estima que el precio final del cuadro en la subasta será de entre 200.000 y 300.000 libras esterlinas, entre unos 275.000 y 412.000 euros. Vivió en Francia, Italia y Bélgica Otra de las estrellas de la sesión será Ivan Pokhitonov (1850-1923), un artista que hasta hace poco permaneció olvidado en Rusia, país del que salió en 1877 para residir en París, donde se integró en los dinámicos círculos artísticos de la capital francesa a finales del siglo XIX y comienzos del XX. Regresó durante cortos períodos a su patria, pero residió en Francia, Italia y Bélgica, donde murió.

 Fue un pintor de gran éxito en vida y la mayor parte de su producción está en colecciones privadas europeas. Las luminosas cualidades etéreas de 'Two Hunters in a Landscape' Los luminosas cualidades etéreas de su óleo Two Hunters in a Landscape atraerán "mucha atención" entre los posibles compradores, avanza Harbick, que sitúa al pintor entre los favoritos de las élites rusas de coleccionistas. Bonhams calcula que el cuadro se subastará por entre 100.000 y 130.000 libras esterlinas, entre 137.000 y 179.000 euros. Exter, reevaluada Exter fue un pintora bielorruso-francesa que también se dedicó al diseño de vestuario y a la docencia artística. 

Considerada como una de las grandes experimentadoras rusas del avant garde, emigró a Francia en 1924 y pasó el resto de su vida en la capital del país, donde siempre se implicó en los movimientos de vanguardia. Sus cuadros han sido reevaluados en los últimos años. Pokhitonov fue académico de artes en Bélgica y expuso varias antologías Pokhitonov, nacido en Ucrania, estaba en la órbita de los impresionistas y de la escuela belga de Barbizon. Aunque nunca perdió la nacionalidad rusa y siempre mantuvo fuertes lazos sentimentales con su país. En Bélgica fue miembro de la Acadamia de Bellas Artes y celebró varias grandes antologías de sus obras, pero el interes por su estilo se fue apagando y sólo desde hace unos años ha vuelto a renacer.

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