La hija del barón ha posado durante la presentación de la exhibición 'After Nature' en el museo que lleva su apellido
Francesca Thyssen-Bornemisza (1958) ha posado durante la presentación de la exhibición 'After Nature' en el Museo Nacional Thyssen-Bornemisza. La segunda colección de arte más importante del mundo -la primera es la de la reina de Inglaterra-. Ayer hizo acto de presencia en Madrid para presentar la nueva exposición del museo y posó para los medios con su característico estilo. En esta, la artista conceptual suiza Claudia Comte daba a conocer algunas de sus obras.
Es una fan de Madrid, de hecho, hace un tiempo se compró una casa en el barrio de las Letras. La aristócrata que se dedica al coleccionismo de arte lo apoya y busca crear una conciencia social alrededor de este. La fortuna que heredó de su padre le ha servido como herramienta para poder lograr su objetivo artístico. Además es una implicada activista medioambiental. En 2011 creó la fundación TBA21-Academy, una organización de naturaleza colaborativa y con el fin de promover la investigación oceánica, denunciar la explotación de los recursos marinos por culpa de la pesca, la polución o las agresiones acústicas que afectan a las especies marinas
Nacida en Suiza, fue miembro de la familia imperial de Austria, por su matrimonio con Carlos de Habsburgo-Lorena, jefe de la Casa Real de Habsburgo, del que ahora está divorciada, y es hija del barón Thyssen y su tercera mujer, Fiona Campbell-Walter.
Aunque ya ha cumplido los 63 años, ha demostrado que es una mujer muy moderna. Fue pelirroja la mayor parte de su vida, ahora ha suavizado ese tono y ha apostado por un suave rubio que rejuvenece sus facciones. Su look en el Museo Thyssen condensaba las claves de una mujer con mucha sensibilidad artística. Le fascina el arte contemporáneo, lo vemos reflejado y lo respiran sus prendas y accesorios. Analizamos todos sus complementos, que protagonizaban unas gafas de montura de pasta cuadradas de color oscuro degradado tamaño oversize, unas microesferas en forma de colgante y anillo de un metal mate, probablemente platino. El vestido de corte oversize en color verde y cuello desestructurado le proporcionaba un toque sexy e hiperfemenino.
Para rematar el look, unas mules de piel con borlones de hilo dorado que le aportaban un toque boho y remataban un look que respiraba calidad en cada centímetro.
Al ver estas imágenes nos ha recordado otra de las mujeres más influyentes en el mundo del arte y que ronda la misma década que Francesca Thyssen. Hablamos de Lady Elena Foster. La española, casada con el arquitecto Sir Norman Foster, es también una mujer dedicada en cuerpo y alma al mundo del arte. Aunque en la actualidad está afincada en Londres, la española sigue visitando en ocasiones la capital, ya que aquí posee la galería Ivory Press, especializada en arte fotográfico.
En sus pocas apariciones utiliza recursos estilísticos muy similares a los de Thyssen, gafas de montura hipermarcada, accesorios de diseño de corte minimal y vestidos de costura y marcados por la estructura geométrica.
Y es que rodearse de artistas despierta una sensibilidad estética especial y única que parece que une a las que se encuentran cerca de esos genios.
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