Consideran injusto que los coleccionistas solo compren en las ferias y no acuden a sus espacios.
Las galerías de arte es como el amigo que siempre está ahí pero no le haces mucho caso. Solo en grandes ceremonias o quedadas con el resto de amigos. Todos miran a los museos y sus programas expositivos, pero tan solo unos pocos asisten a las exposiciones de las galerías, que inundan las calles de las grandes ciudades europeas.
"Estamos perdiendo hacia el circo mundial de los acontecimientos"
Pero las galerías también tienen su propio simposio. Durante estos días se ha celebrado el Talking Galleries Barcelona Symposium, situando a la Ciudad Condal como la capital mundial del galerismo. Una treintena de profesionales del sector debatieron sobre el papel de éstas y su futuro en el mercado del arte internacional.
De las preocupaciones expuestas está la del papel de las galerías en las ferias del arte. La dependencia cada vez mayor de los distribuidores de las ferias fue el tema central. El distribuidor de Salzburgo y con sede en París, Thaddaeus Ropac, afirmó en su discurso de apertura que las galerías deberían realizar el 75% de sus negocios en sus propios espacios, en lugar de en ferias. “Estamos perdiendo hacia el circo mundial de los acontecimientos”, señala Ropac, que lamenta que las galerías puedan hacer la mitad de sus ventas anuales en los stands de las ferias de arte y no en sus espacios.
La feria no debe ser el “centro de la actividad”
Ropac reconoce que las ferias son lugares importantes para conectarse con la comunidad artística, pero la galería debería esforzarse por ser el “centro de la actividad”. “A veces me niego a enviar una obra a una feria y hacer que el coleccionista no vaya a uno de mis espacios”, lamenta el coleccionista.
Galería Max Estrella.
Por su parte, la galerista madrileña Elba Benítez valora que el número de ferias en todo el mundo es “problemático para algunas galerías”, ya que refleja la brecha entre el dinero y los jugadores más modestos. Lisa Schiff, fundadora de SFA Art Advisory –que reúne a una serie de galerías norteamericanas-, también se suma a las críticas y afirma que sus “clientes están quedamos y deprimidos”.
En el bando enemigo, Victoria Siddal, directora de Frieze, fue la representante de las ferias de arte en el simposio de Barcelona. Para Siddal, “las ferias son un lugar para descubrir artistas, ver arte y gente bajo el mismo techo”, pero recalca que no buscan reemplazar a las galerías, sino apoyarlas. En su opinión, las ferias ayudan a dar más visibilidad a los expositores más pequeños. Ahora, solo falta ver los datos que deje la Feria ARCO de Madrid, que se celebra a finales de febrero.
Fuente
http://www.ritmos21.com
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