John Bankston es un narrador autodeclarado y novelista visual, cuyo trabajo es particularmente relevante y adaptable con el tema del lavado de manos. Con sede en San Francisco y se formó como pintor, Bankston comenzó a utilizar las estructuras visuales de libros para colorear para niños en la década de 2000 para crear historias fantásticas que exploran las identidades personales y mundos interiores. Libros para colorear-negrita negro cuyos contornos de los personajes de cuentos, animales, etc., están destinados habitualmente para niños deseosos coloreen adentro como una actividad participativa le ofrecieron un tropo-visual desde el que crear paisajes y personajes imaginarios. Durante la última década, se ha construido una iconografía muy personal que sigue a desafiarlo. De manera formal, que ha sido capaz de utilizar la estructura de una página de libro para colorear de fusionar su interés por la interacción entre el lineal y lo pictórico. Bankston está particularmente interesado en la construcción de lo que él llama "narrativas" sostenidos mediante elementos visuales, no textos, para crear contenido. A menudo se envía a sus personajes imaginarios, con frecuencia híbridos humano / animal, en los viajes de transformación.
Estos cuentos infantiles pueden parecer a primera vista, pero mucho más minas exámenes adultos de nuestras relaciones con el subconsciente, así como la forma en que construimos nuestras identidades personales. Sus referencias a la cultura popular, los cuentos populares, la literatura fantástica, y la oferta de la cultura afro-americana y africana todos nosotros los puntos de entrada a su mundo, independientemente de nuestra edad, género o etnia.
De manera paralela, la salud pública tiene una larga su toria de la utilización de la narración en las campañas para fomentar hábitos saludables y de influir en el cambio de comportamiento. Hay mucha evidencia para apoyar la efectividad del uso de herramientas de la cultura popular, incluyendo cuentos ilustrados, cómics, juegos, vídeos musicales, programas de radio, y carteles, para hablar directamente a las audiencias objetivo y para influir en el comportamiento en áreas tales como comer bien, hacer ejercicio y asumir la responsabilidad personal.
John Bankston es ante todo un artista, ni un comunicador ilustrador o para la salud. Sin embargo, de Bankston instructiva parábola mágica lavado de manos cae mucho en la tradición de los mejores de la narración de la salud pública. Una vez más, Bankston ha creado un mundo imaginario llamado el Bosque del arco iris. Su protagonista, Donkey Boy, se encuentra en un dilema cuando sus manos se convirtieron en garras después de sumergirlos en un charco brillante. Sólo a través de la ayuda de muchos amigos fantásticos qué burro Boy restaurar sus manos cuando se entera de cómo lavarse las manos correctamente. Su historia está destinado a crear recuerdos permanentes visuales para ser retirados del mercado durante nuestros rituales de lavado de manos
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